Puede sonar a chiste o a mito urbano, pero un nuevo análisis científico lo confirma: las mascotas especialmente los perros terminan pareciéndose a sus dueños, tanto en lo físico como en lo emocional.
👀 Desde parecidos en el tipo de cabello hasta miradas similares, hay estudios donde incluso personas desconocidas lograron emparejar correctamente fotos de perros con las de sus humanos solo observando rasgos físicos. Increíble, ¿no?
Pero lo más llamativo va más allá de la apariencia. Investigadores de la Universidad de Missouri descubrieron que el carácter también se contagia: personas muy sociables, nerviosas o cariñosas tienden a tener perros con actitudes muy parecidas. 🧠💞
Esto se explicaría por dos razones:
1️⃣ Elegimos mascotas que reflejan (aunque no lo sepamos) nuestra forma de ser.
2️⃣ Con el tiempo, la convivencia genera sincronía emocional y hasta comportamientos compartidos.
Así que si alguna vez sentiste que tu perro es como un “mini tú”… ¡tenías razón! 🐾✨