
La noche del domingo en Glastonbury 2025 fue testigo de uno de los momentos más comentados del festival: Olivia Rodrigo, ícono del pop alternativo, subió al escenario principal para entregar una actuación que no solo reafirmó su estatus como estrella global, sino que también conectó generaciones al invitar a una leyenda viva del rock británico.
En medio de su show en el emblemático Pyramid Stage, la artista de 22 años se tomó un momento para expresar su amor por la música inglesa. Con una mezcla de emoción y reverencia, presentó al público a quien llamó su “ídolo personal” y uno de los más grandes compositores nacidos en Inglaterra: Robert Smith, el carismático líder de The Cure.
El público estalló cuando Smith apareció con su inconfundible look y una sudadera brillante. Juntos interpretaron dos clásicos atemporales: “Friday I’m in Love” y “Just Like Heaven”, desatando una ola de nostalgia y ovaciones entre los asistentes. Fue un encuentro mágico entre el new wave de los 80 y el pop confesional del nuevo siglo.
Rodrigo, que ya había pisado Glastonbury en 2022 en el Other Stage junto a Lily Allen, esta vez cerró la jornada dominical con un set de 90 minutos que recorrió lo mejor de sus álbumes Sour y Guts. Canciones como “Drivers License”, “Brutal” y “Get Him Back!” fueron coreadas por miles en una noche que consolidó su presencia en la historia reciente del festival.
Esta colaboración con Smith se suma a una serie de momentos memorables que Olivia ha protagonizado durante el último año, compartiendo escenario con nombres como David Byrne, No Doubt, Jewel, Stevie Nicks y Sheryl Crow, demostrando que no solo domina su generación, sino que también sabe rendir tributo a quienes la inspiraron.